Un estudio que consigue una excepción con los roguelikes
Todos tenemos algún género de videojuegos que se nos atasca más que otros, pero que aún así siempre volvemos para darle una última oportunidad. En mi caso siempre han sido los roguelikes. Es verdad que al principio me ocurría esto con los metroidvania, pero poco a poco les he ido cogiendo el gusto hasta el punto de querer jugar a casi todos los que salen. Sin embargo, he empezado montones de roguelikes y han sido pocas veces las que he visto los créditos finales.
Juegos como Hades o Dead Cells han pasado por mis manos durante varias horas y al final acababan con mi paciencia por tener que empezar siempre desde el mismo punto, aunque hubiese mejoras permanentes. Por esto, otros rogues con una progresión más lineal, como Cult of the Lamb, Inscryption o Returnal, sí consiguen mantenerme enganchado hasta el final.
El primer roguelike que conseguí pasarme y de esta forma quitar una espinita digital que tenía clavada de hace tiempo, fue el primer Moonlighter. Digital Sun creó mi favorito del género hasta el día de hoy, gracias a un título que funcionaba como un engranaje perfectamente engrasado. Todo se dividía entre el día para la gestión de la tienda y distintas mejoras y la noche, en la que explorar completas mazmorras con un sistema de combate simple pero dinámico y divertido. Su bucle jugable sí me parecía atrapante, pues cada run te hacía mejorar sustancialmente y avanzar no era excesivamente complicado, pues había bastantes checkpoints.
Con todo esto, mis expectativas por Moonlighter 2: The Endless Vault son altas por méritos propios del estudio. Hemos tenido la gran suerte de probar, antes de tiempo, una demo que explora los primeros pasos como mercader en esta nueva dimensión.
Entre portales, deudas y un apartado artístico sublime: así empieza la aventura
El inicio pone en contexto tanto a los que no han jugado al primer moonlighter como a los que sí lo han hecho, pero no recuerdan ni un ápice de la historia. Básicamente, somos un mercader de Rynoka que acaba en una nueva dimensión tras haber sufrido la suya una invasión por el malvado Moloch, el coleccionista interdimensional. De esta forma, seguimos con nuestro curro, pero en otro poblado llamado Tresna, con sus tiendas, gentes y, por supuesto, un portal que nos lleva a través de distintas dimensiones.
Lo primero que entra por los ojos y lo que me ha parecido de mayor nivel, es su apartado artístico. El pixel art inspirado en la época de los 16 bits del primero se deja atrás completamente por un precioso 3D. La iluminación, modelados de personajes y escenarios son un auténtico gusto para la vista. Además, su banda sonora compuesta por Chris Larkin (Hollow Knight) es también maravillosa, siendo tranquila y suave cuando comerciamos y frenética e intensa cuando combatimos.

La trama se vuelve interesante rápidamente. Parece que Will, el protagonista y su amiga Tomo están acostumbrándose poco a poco a su nueva vida fuera de Rynoka. Sin embargo, un enorme cubo aparece en el centro de la plaza llamado Endless Vault (La Cámara Infinita). Te ofrece desafíos que, una vez completados, te promete abrirse para darte aquello que más deseas. ¿Recuperar Rynoka, quizás? Para saberlo habrá que jugar al título completo, pues en la demo nos dejan con todas las ganas. De hecho, al realizar el primero de ellos la demo acaba, toca ser pacientes.
Los pocos diálogos que hemos podido ver, mantienen el tono distendido y con toques cómicos de la primera parte. Con algún personaje muy histriónico como Ms. Scratch, nuestra casera, que no deja de meter presión por pagarle todas las deudas. No huimos del capitalismo ni en los videojuegos. Esto es inhumano.
Primer contacto con el sistema de combate: nueva estructura y alta dificultad
Durante la demo, hemos podido jugar un tercio de la primera dimensión. En el menú aparecen tres que parecen ser las que compondrán el total del juego, a no ser que haya sorpresas. Es un escenario desértico llamado Kalina, un lugar corrompido por un showman y su tecnología. De primeras, nos lanzan ahí a modo de tutorial para aprender las mecánicas básicas del combate: el ataque cuerpo a cuerpo, a distancia, rodar y ataque con mochila.
El rodar sirve para todo, tanto para esquivar como para saltar pequeños obstáculos. Es de lo que más se abusa, pues te hace inmune durante la voltereta y te hace avanzar más rápido por los escenarios. Lo más interesante aquí es el ataque con mochila, pues se utiliza al meter a un enemigo en ruptura para lanzarle lo más lejos posible, tanto al vacío como contra una pared. Además, es útil para repeler ciertos ataques a distancia que sean de color morado. Creo que es una mecánica que irá evolucionando a medida que avancemos en la aventura y nos enfrentemos a enemigos que nos lo exijan más.
Para ser francos, no he llegado a mimetizarme con su sistema de combate. Lo he notado algo brusco de más en algunas situaciones y el rodar me ha traicionado más de una vez, no funcionando tan preciso como esperaba. A esto se le suma una dificultad mucho más elevada que la primera parte. Un movimiento en falso y cualquier enemigo puede acabar contigo, lo que conlleva a que todas las reliquias de tu inventario reduzcan su valor a la mitad.

La estructura de mazmorras cambia por completo lo que vimos en Moonlighter. En aquel juego, explorábamos salas interconectadas y creadas proceduralmente, mientras que en Moonlighter 2 entramos en salas individuales, pasando a la siguiente a través de una elección entre varias según lo que busquemos: mejores tesoros con enemigos más difíciles, mejoras temporales, tesoros fáciles de conseguir, etc. Aquí vuelvo a quedarme con lo que ofrecía Moonlighter, por ahora, pues cada sala incitaba más a la exploración.
Eso sí, lo que hemos visto es apenas el principio, pues hay hasta 4 armas esperando a ser probadas. En la demo hay dos disponibles: la espada y los guanteletes. Cada una cuenta con su propia habilidad especial y parece que habrán hasta 4 variaciones de la misma. Esperaremos a ver qué nos tienen preparado aquí, pues puede mejorar mucho el sistema de combate según avancemos.
Como bonus, si lográis pasaros la demo, tendréis un combate extra contra un jefe. Este combate me ha parecido el mejor que he jugado en las casi tres horas que le he dedicado a Moonlighter 2 así que os recomiendo encarecidamente que lo probéis.
Mago de la venta y la maldición: el arte de gestionar reliquias
En Moonlighter 2, el 50% de la aventura consta de ser un mago de la venta y recolección de reliquias. Lo mejor aquí es la gestión del inventario. La mayoría de reliquias llevan consigo alguna maldición que, bien utilizada, puede aumentar mucho el valor de los objetos que llevamos. Por ejemplo, existe la Insignia de la Luna, que te dará 50 de oro por cada leña que tengamos en el inventario una vez volvamos a Tresna. A este se le pueden añadir otras que mejoren el valor de las leñas si las colocas en la derecha, otras que queman objetos y les hacen subir el valor o incluso comunes que solo dan oro y nada más.
Cada vez que abrimos un cofre es momento de planear bien nuestra estrategia para maximizar los beneficios, siendo este el mejor aspecto roguelike que tiene la demo. Todos estos objetos luego hay que venderlos, y aquí es donde entra la tienda. Contamos con 4 pedestales donde ir colocando nuestros productos. Cada vez que un comprador quiera uno, nos acercaremos amablemente y podremos hacer dos acciones: potenciar y cultivar. La primera añade un valor fijo a la venta y la segunda un porcentaje del total.

El precio no lo fijamos nosotros, sino que lo aumentamos con estas acciones y algunas más. A medida que vas vendiendo, aparecen mejoras temporales como aumentar el valor de potenciar/cultivar, obtener ventajas especiales, aumentar los huecos para añadir más potenciar/cultivar por venta, etc. También existen las mejoras permanentes en un árbol que nos da una idea de que este minijuego es mucho más grande de lo que parece a simple vista. Sí, la tienda es un roguelike en sí misma.
Este codiciado oro, lo utilizaremos para decenas de mejoras permanentes tanto en combate como en tienda y para obtener nuevas armas y armaduras. Eso sí, en la demo no están disponibles, pero se pueden ver otras tiendas que seguro que nos ofrecerán jugosos artículos que harán que nuestra aventura sea más llevadera.
Conclusión
La demo de Moonlighter 2: The Endless Vault ofrece alrededor de 3 horas de uno de los grandes roguelikes que tenemos para este 2025. Su apartado artístico, tanto visual como sonoro está entre lo mejor que ha tenido nunca el género. Es una delicia pasear tanto por Trensa, el nuevo poblado como por Kalina, la primera desértica dimensión a la que nos adentramos. El carisma de los personajes y el interés de la trama nos ha dejado con ganas de mucho más y eso es una fantástica noticia.
El sistema de mazmorras se asemeja más a títulos como Hades que al propio Moonlighter, una decisión con la que tengo ciertas dudas de primeras y que espero que se disipen una vez salga el juego final. El sistema de combate es funcional, aunque no todo lo satisfactorio que me hubiese gustado. Eso sí, esto es solo el principio y viendo todas las opciones que habrá más adelante, estoy seguro de que evolucionará lo suficiente como para ser más divertido y profundo. Y es que la dificultad es alta, mucho más que la primera parte, por lo que jugar con la frustración es un factor más dentro de Moonlight 2.
Lo mejor viene en la gestión del inventario para maximizar todo lo que podamos el valor de nuestras reliquias. Debemos jugar con las posiciones, con los efectos de cada una y los huecos que tenemos disponibles. Todo un rompecabezas que se vuelve más divertido a medida que sabemos mejor lo que hacemos. Este valor luego hay que trasladarlo a una tienda que funciona como un minijuego con más capas que la primera entrega. Es muy divertido lo dinámica que es la venta, pues hay que estar a varias cosas al mismo tiempo y hacerlo rápido para que tus clientes no salgan descontentos.
En definitiva, una primera prueba de toque que todos podéis probar desde ya mismo por motivo del Steam Next Fest 2025 haciendo click aquí. El juego de Digital Sun y 11 Bit Studios estará disponible este verano para PC, PS5, Xbox Series X/S y disponible día uno en Xbox Game Pass.
* Hemos podido probar la demo antes de tiempo gracias a una clave de Steam proporcionada por 11 Bit Studios a través de Keymailer.