• Social Image
Portada X-MEN (2000)

Análisis de X-Men (2000)

Los X-Men consolidan una de mis sagas preferidas de superhéroes. Entraron por primera vez en mi vida con un juego heredado de PS1, del cual no recuerdo el nombre. Por lo que he investigado podría tratarse de X-Men: Mutant Academy. Era un juego de lucha, en el que escogías un personaje y combatías contra distintos X-Men en diversos escenarios. Cuando mi consola saltó por los aires, me olvidé completamente de la existencia de los X-Men. Sin embargo, el año pasado, tras ver Doctor Strange y el Multiverso de la Locura, nos picó el gusanillo de repasar todo el material extistente de los X-Men.

Pasé de no saber quién era el Profesor Xavier a sentir un amor-odio por Magneto y una debilidad muy fuerte por Logan. En 2024, con el estreno de Deadpool y Lobezno, me invadió la necesidad de analizar las películas con detenimiento y comentarlas como se merecen. Espero poder hacerles justicia, ya que las considero bastante buenas. No sé si es porque soy amante de lo viejo y demasiado reacia a los productos nuevos, pero colocaría cualquiera de esas películas por encima de cualquier otra con sofisticados efectos especiales y calidad de imagen 8K.

X-Men se estrenó en el año 2000 (por favor, que alguien me devuelva allí). No ha pasado tiempo casi. Solo veinticuatro años. Su director es Bryan Singer y está escrita por David Hayter. Los actores están elegidos a la perfección para su rol. Se mimetizan tan bien con su personaje, que es difícil no identificarle con esa cara y gestos de ahí en adelante. Por ejemplo, si alguien me habla de Wolverine, yo veo a Hugh Jackman con sus patillas y sus pelos de loco haciéndose el rudo, sacando las garras o con un puro en la boca.

El origen de la discordia

La primera escena de la película nos deja entrever algunas cosas que tendrán relevancia en futuras entregas. Nos situamos en la Polonia de 1944. Los soldados conducen a los prisioneros al interior de un campo de concentración. Un niño, con una serigrafía de números en su brazo derecho, avanza mirando a todos lados con temor y tristeza. De repente, le separan de sus padres y el pequeño empieza a patalear, vociferar y retorcerse, a la par que llama a su familia a gritos. Los militares le sujetan por los brazos y le impiden salir corriendo. Cierran tras de sí las portezuelas de una verja metálica. El chico se descontrola y se lanza al suelo. Las puertas se ponen a temblar y el metal se estruja, cediendo. Un poder magnético las abre de par en par y los guardias reducen al niño como pueden.

Ese chiquillo no es otro que Erik Lehnsherr (Ian Mckellen), el futuro Magneto. Erik fue un niño mutante que tuvo que aprender a vivir con la segregación y el menosprecio. Por circunstancias ajenas a él y más propias de una historia corrupta, le tocó acostumbrarse a ser contemplado con desdén, como si no fuera más que un insecto. Lo que, en un inicio, era raro, misterioso y preocupante, eventualmente, se convertiría en miedo. Erik sentiría predilección por los sembradíos de pánico, por amedrentar a los humanos corrientes para que no se atreviesen a orientar su temor y rabia hacia los mutantes y utilizaría sus poderes para proteger e instaurar un orden que respetase a todos los portadores del gen mutante. Como bien dijo Santayana; «aquel que olvida su historia está condenado a repetirla».

Magneto de pequeño en campo de concentración.
Un joven Erik es maltratado en un campo de concentración. El claro origen de su rechazo por la raza humana.

A través de esos primeros minutos de metraje, podemos comprender la ideología del personaje. Empatizar con él o no hacerlo, ya es una cuestión personal. Poseemos el conocimiento de que Erik era un niño mutante rodeado de “personas normales” y un judío en mitad del holocausto y el exterminio nazi. Erik Lehnsherr sobrevivió a ambas cosas. Sin embargo, su pasado le marcó profundamente. A tal grado, que, muchos de esos acontecimientos son la causa del origen de Magneto.

Es razonable que, una persona que ha vivido tales desgracias, no quiera tener que agachar la cabeza nunca más. Erik ya vivió una guerra y un exterminio. A Magneto no le asustan las batallas ni las contingencias. Los caídos en combate forman parte del camino hacia esa ansiada libertad. A mi modo de ver, su objetivo no es perpetrar un genocidio, sino lograr lo mismo que los franceses buscaban con su Revolución; la igualdad entre mutantes y humanos ordinarios.

El lobo solitario

Dejamos de lado el pasado para retornar al presente. Una chica de diecisiete años está a solas en su habitación con su novio. Su nombre es Marie (Anna Paquin). Como hacían, hacen y harán todos los jóvenes de su edad, la pareja comparte un momento tierno y se besan. Pero, algo va mal. El chico se desploma en el suelo con un aspecto deshidratado y fúnebre. Marie entra en un estado de conmoción y se escapa de casa. Posteriormente, se nos explica que el chico pasó tres semanas en coma.

Marie adopta el sobrenombre de Pícara (Rogue) y vaga sin rumbo hasta que termina en un bar de mala muerte, donde se celebran combates de boxeo. Allí, hay un tipo desgreñado, con patillas y barba de varios días, que derrota a todos sus contrincantes sin sufrir un solo rasguño. Cualquiera diría que tiene los huesos hechos de metal. Marie opta por pasar desapercibida y se oculta tras una capucha negra. El hombre se acerca a la barra y pide que le sirvan una cerveza. Su nombre es Lobezno (Wolverine).

Dos hombres armados se aproximan a él y le intentan amedrentar para que les devuelva su dinero, considerando injusta una pelea entre un mutante y un mortal corriente. Marie observa perpleja como de los puños de Lobezno (Hugh Jackman) brotan unas afiladas garras. Las cuchillas se detienen a milímetros del gaznate de uno de aquellos tipos. El dueño del bar saca una pistola y apunta a Wolverine a la cabeza. Marie contiene la respiración, mientras que, Lobezno, corta de un sablazo el cañón del revólver.

Lobezno se marcha y monta en su destartalada caravana. Rogue, impresionada por ver a alguien como ella y sintiéndose menos sola y extraña, se cuela en el remolque y va de polizón durante el viaje. Wolverine acaba por descubrirla y, aunque está a punto de abandonarla en medio de la nada, permite que le acompañe. Aquí, tenemos el primer indicio de que, a pesar de que Lobezno se las dé de duro e insensible, atesora un corazón puro y bondadoso bajo aquel caparazón metálico. Ambos traban algo parecido a una amistad o camaradería y él acaba confesándole su verdadero nombre, Logan.

Lobezno en su primera aparición en el bar.
No podía ser de otra manera, la primera aparición de Lobezno es en un bar de mala muerte.

Sufren un accidente y son sorprendidos por Dientes de Sable (Tyler Mane), uno de los secuaces de Magneto. Cíclope (James Marsden) y Tormenta (Halle Berry), dos estudiantes de la Escuela para Jóvenes Talentos del Profesor Xavier, acuden a su rescate. Se los llevan a Westchester, Nueva York. Lugar donde se erige la imponente Mansión X, disfrazada de colegio para niños superdotados o con habilidades especiales.

Jean Grey (Famke Janssen), una telépata y enfermera al mismo tiempo, trata las heridas de Logan, que no es propenso a dejarse tocar por desconocidos. Sumido en la confusión y en las mareas de la inconsciencia, Lobezno se levanta de forma abrupta y la ataca. Esta es una cualidad de Wolverine; ser desconfiado por naturaleza y estar siempre alerta, siempre al acecho.

Logan se escabulle por los pasillos de las instalaciones y comienza a escuchar una voz dentro de su cabeza que le dice a dónde debe ir. La sigue, entre pasmado y a la defensiva, y termina en una clase en la que Charles Xavier (Patrick Stewart) está impartiendo una lección sobre física a sus estudiantes. La cara de Lobezno, cuando una de las alumnas se despide y se marcha atravesando la puerta como un fantasma, es todo un poema.

El Profesor le pone en contexto sobre qué es la escuela; un lugar donde los mutantes pueden gozar del anonimato, desarrollar sus poderes lejos de miradas indiscretas y alcanzar su máximo potencial. Menciona de pasada a Magneto, un mutante peligroso que busca iniciar una guerra entre mutantes y humanos. Xavier es la contraposición de Magneto. Cree en la convivencia pacífica de humanos y mutantes y, ante todo, mantiene viva la esperanza de que ese sueño se convierta en realidad algún día. Magneto parece querer algo de Logan, aunque ni Charles ni el propio Lobezno tienen idea de qué puede ser.

Finalmente, el Profesor termina convenciendo a Logan de que se quede en la escuela, mostrándole que Pícara se ha adaptado muy bien y está asistiendo a clases y prometiéndole respuestas sobre su pasado. Logan lleva un tiempo pululando por ahí, sin rumbo. Quince años para ser exactos. No recuerda gran cosa de su pasado y Xavier realiza un movimiento maestro, ya que sabe que la atención de Wolverine se centrará en aquel asunto.

Política para necios

En el Congreso, Jean Grey, expone sus argumentos contra la Ley de Registro de Mutantes. Según ella, que la identidad de cada mutante fuese conocimiento público sería muy peligroso para ellos, puesto que existen casos previos de mutantes que revelaron sus habilidades y recibieron violencia en retorno. Lo diferente conduce al miedo y el miedo a la hostilidad. El Senador Kelly desbanca todos los hechos que presenta Jean con los suyos propios.

En la sala, entre la multitud de aplausos y vítores, se encuentran Charles y Erik. Mantienen una breve conversación, haciendo alusión a su vieja amistad, en la que Charles expresa que la humanidad ha evolucionado y Erik replica con que la evolución se ha producido hacia ellos, no contra ellos. Lo que les sitúa en la línea de peligro, porque, si los humanos les temen y cuentan con la capacidad de hacerles daño, se lo harán con la excusa de defenderse. Antes de marcharse, Erik, le dice a Charles que no se interponga y el Profesor Xavier le pide a Magneto que no pierda la esperanza.

En su juventud, Erik y Charles, eran amigos. En la vejez, no parecen considerarse enemigos como tal. Se profesan un respeto distante, que habla del conocimiento y el valor de una amistad que solía ser genuina. Los años les situaron en lados opuestos de la balanza. Xavier terminó fundando una escuela para jóvenes mutantes y utilizando sus poderes de control mental para hacer el bien. Mientras que, Erik, acabó por corromperse del todo y usó sus habilidades de manipular el metal para sembrar el pánico y el caos.

El Profesor Xavier es el director de la escuela y el líder de los X-Men. Es una personalidad reconocida para los medios, las autoridades y los dirigentes del país. En cambio, Magneto, ha acogido bajo su ala a un grupo de mutantes (Dientes de Sable, Sapo y Mística) que le son fieles y hacen sus recados y trabajo sucio. Charles escoge creer y confiar en las personas. Erik perdió hace tiempo la capacidad de quedarse sentado esperando a que el mundo aceptase a los mutantes.

Mística (Rebecca Romijn), personaje que recuerda a los Avatares de James Cameron, es una cambiaformas. En su aspecto natural, tiene la piel azul, los ojos amarillos y el cabello rojo fuego. Puede adoptar la apariencia de quien quiera. Podríamos decir que es el arma más valiosa de Magneto, la más fuerte y poderosa de sus aliados. Secuestra al Senador Kelly y le conduce a la guarida secreta de Magneto.

Una vez allí, Erik da su típico discurso de villano y somete al senador a los efectos de una máquina que hace funcionar gracias a sus poderes. El campo electromagnético golpea de lleno a Kelly y altera su estructura genética y ósea. Su cuerpo cambia, volviéndose elástico y moldeable, como un cuerpo de agua. El esfuerzo de probar la máquina drena a Magneto y casi le arranca la vida. Llega a una conclusión previsible; que es demasiado viejo y débil como para ponerla en marcha él solo.

Senador Kelly escapa siendo un mutante.
El senador Kelly descubre sus nuevos poderes en una escena bastante cómica. Bob, ¿eres tú?

El objetivo de dicha máquina es transformar en mutantes a todos los humanos que alcance con su onda expansiva. No afecta en lo más mínimo a los que ya poseen el gen mutante. Esto se puede analizar de dos maneras. Una, que no es un plan tan malévolo, ya que Erik busca la igualdad para los suyos en un mundo en que los de su especie están en desventaja. Y, dos, que es una maquinación retorcida y perversa, porque convertir en mutantes a los humanos en contra de su voluntad no está bien. Lo que debemos tener en cuenta es que, Magneto, se ha cansado de dialogar y esperar una aceptación que jamás va a llegar y que, algunos humanos, sienten asco, desprecio y pavor de los mutantes.

El Senador Kelly utiliza a su favor los poderes que le ha conferido la máquina de Magneto y se escurre entre los barrotes de la prisión. Acude a la escuela del Profesor X para pedir ayuda. Llega tambaleándose y en un estado deplorable. Pide ver a la Doctora Jean Grey. Charles Xavier usa su telepatía para infliltrarse en la mente de Kelly y averiguar qué demonios le ha pasado. Ve a Magneto utilizando la máquina y sufriendo los efectos adversos. Entiende rápidamente cuáles son las intenciones de su viejo amigo.

Jean y Charles exponen al resto de los X-Men que la máquina de Magneto altera la genética humana y provoca que afloren las mutaciones. Jean ofrece su diagnóstico sobre el estado de salud del senador. No tiene buena pinta, ya que el cuerpo del senador ha rechazado la mutación. Eventualmente, Kelly, acaba muriendo y transformándose en un charco de agua frente a los ojos de Tormenta.

La huida precipitada de Rogue

Lobezno y Pícara sufren un infortunio que acaba desencadenando como un efecto dominó el resto de los acontecimientos de la película. Una noche, Logan, está teniendo una pesadilla o, más bien, flashbacks sobre ese pasado que no recuerda. Rogue le escucha jadear, revolverse en la cama y farfullar palabras inconexas. Decide colarse en su habitación para comprobar que se encuentre bien. Ya estamos puestos en antecedentes con lo que despertar súbitamente a Wolverine implica. Las garras de Lobezno atraviesan el hombro de Pícara y, a pesar de sus disculpas atropelladas, ella solo ve una opción; tocarle el rostro.

Hasta aquí, no sabíamos mucho sobre los poderes de Pícara. Solo que besó a un chico y, literalmente, lo dejó seco. Teniendo en cuenta que ella misma está asustada de su poder, no es sorprendente que lo esconda. Su mutación consiste en la absorción de la fuerza vital y de las habilidades especiales de aquellos a los que toque. Por eso porta siempre unos guantes negros. Es un don que, si fuera utilizado para hacer el mal, sería catastrófico. Afortunadamente, Rogue es una X-Men.

Cuando posa su mano sobre la mejilla de Lobezno, absorbe las propiedades curativas y de regeneración que tiene el cuerpo de Logan. No por nada Deadpool y Wolverine tenían un juego que consistía en cortarse partes del cuerpo y ver quién podía regenerarlas antes. Rogue se cura y Lobezno cae al suelo como un saco de patatas. El escándalo despierta a niños, adultos y adolescentes y se presentan en la puerta de la habitación. Todos ven lo que Pícara ha hecho.

Hay que hacer un pequeño inciso para hablar sobre la relación que tienen Marie y Logan. Como Jean le comenta a Lobezno, parece que Pícara está deslumbrada con él. Puede que sea un inocente crush adolescente o que sienta admiración por él. A fin de cuentas, Lobezno rescata a Rogue de un incierto destino al permitir que le acompañe y ella no es más que una niña perdida. Logan se comporta de modo paternal y protector hacia ella. Tienen una relación muy tierna y una conexión particular, que deja entrelucir una amistad sólida.

Pícara absorbiendo vitalidad de Logan
El gran poder de pícara es, al mismo tiempo, una maldición que le impide tocar a sus seres queridos.

Mística se infiltra en la escuela y se hace pasar por Bobby, un compañero de Pícara que ha desarrollado una relación especial con ella. Bobby-Mística le dice a Rogue que se marche de la escuela, que los alumnos están asustados y Xavier furioso. La convence de que estará mejor sola, ya que así no arrastrará a nadie con su espiral de destrucción. Marie hace justo lo que Magneto espera de ella.

Cuando los X-Men se enteran de que Pícara ha huido, Xavier utiliza a Cerebro para localizarla. Cerebro se encuentra en una sala esférica, como el interior de una bola de discoteca, y sirve para amplificar las capacidades mentales de Charles. El Profesor explica que las ondas mentales de los mutantes son diferentes a las de los humanos y que con Cerebro puede rastrear a mutantes a largas distancias. A la cuestión de por qué no puede utilizarlo para señalar la ubicación de Magneto, responde que Erik le ayudó a construir Cerebro.

Charles se coloca el casco de Cerebro y se pone ideas a la obra. Busca a Rogue y la encuentra en la estación de trenes, mezclada con el gentío. Tormenta y Cíclope se preparan para ir a detenerla. El Profesor advierte a Logan de que no salga, porque estará cayendo derechito en la trampa de Magneto. Evidentemente, Lobezno no le hace ni caso y le roba la moto a Cíclope.

Logan se topa con Marie ya subida en el tren y se sienta a su lado. Pícara le pregunta si debería volver a la escuela. A lo que Logan le contesta que siga su instinto, pero que piensa que el Profesor X entiende por lo que está pasando. Lobezno promete que cuidará de ella. De repente, el tren se detiene de golpe y Magneto realiza su aparición estelar.

Se descubren los entresijos del plan de Magneto cuando llama a Logan engreído por pensar que buscaba algo de él. Le noquea con falicidad, considerando que Erik controla el metal y el esqueleto de Lobezno está compuesto de Adamantium. Lo que Magneto ambiciona en realidad es el poder de Rogue. Quiere usarla para que absorba sus poderes magnéticos y arranque la máquina. Con sus poderes potenciados, Pícara sería capaz de mantener la máquina encendida el tiempo necesario para que el plan de Magneto triunfase. Pero, aquello resultaría en su inequívoca e irreversible muerte. Erik le lanza un dardo a Pícara, dejándola inconsciente, y la rapta.

En el vestíbulo de la estación estalla una batalla campal entre Tormenta y Dientes de Sable y Cíclope y Sapo. La policía rodea el edificio y, cuando Magneto sale flanqueado por sus dos secuaces, Charles controla la mente de Dientes de Sable para detenerle. Sin embargo, se ve obligado a dejarle escapar, ya que Erik dispara a un hombre y Xavier frena la bala con su mente.

La Estatua de la Libertad

Mística se cuela en la sala de Cerebro, imitando los ojos del Profesor, y sabotea el artefacto. Cuando Xavier intenta utilizar a Cerebro para buscar el nuevo paradero de Rogue, la sustancia que Mística ha inyectado en la máquina se adentra en su sistema inmunológico. Charles queda en coma y no puede ayudar a sus X-Men. Se las tendrán que arreglar sin él.

Jean arregla la avería de Cerebro y decide ponérselo por primera vez, porque el Profesor está fuera de combate. Scott (nombre de pila de Cíclope) trata de detenerla, pero es demasiado tarde. Jean resurge de la habitación y anuncia que sabe hacia donde se dirige Magneto.

Magneto planea colocar la máquina en Liberty Island, utilizar a Pícara para ponerla en funcionamiento y convertir en mutantes a la cumbre de líderes mundiales que van a reunirse en Ellis Island. Ubica su base de operaciones en la Estatua de la Libertad. Lo que Magneto desconoce es que, su máquina, produce mutaciones demasiado inestables y que puede causar la muerte de sus conejillos de indias, como ocurre con Kelly. Los X-Men piensan que, si Magneto le cede a Rogue parte de sus poderes y conecta la máquina, podría arrasar la ciudad de Nueva York. Así que ponen rumbo a Liberty Island.

Los X-Men se enzarzan en una batalla con los secuaces de Magneto. Logan, Scott y Jean se enfrentan a una escurridiza Mistique, que ha tomado la forma de Lobezno. Tormenta se encara con Sapo en una escena que me causa bastante gracia (no preguntéis por qué) y le interroga sobre si sabe qué les ocurre a los sapos cuando les cae un rayo encima. Mística y Sapo quedan fuera de combate, pero aún faltan Dientes de Sable y Magneto.

Mística disfrazada de Estatua de la Libertad.
Mística está constantemente engañando a los X-Men.

Magneto utiliza sus poderes para apresar a los X-Men con barras de metal. Wolverine consigue escapar y lucha con Dientes de Sable, que acaba cayendo al vacío al ser golpeado por el rayo de Cíclope. Erik posa sus manos en el rostro de Pícara y comienza a transferirle sus poderes. Rogue grita de dolor y varios mechones de su cabello se tornan blancos. El rostro de Erik adquiere un parecido al del pergamino antiguo y amarillento. La máquina se activa con una fuerza descomunal y el aire se llena de un poder electromagnético, en cuyo centro están Pícara y Magneto.

Jean y Tormenta utilizan sus poderes telequinéticos y climáticos para levitar a Logan y acercarle a Magneto. Lobezno se lanza de un salto al interior del azulado campo y desenfunda sus garras. Erik le contiene, aprovechándose de que su poder le ofrece una gran ventaja sobre Lobezno. Sin embargo, Cíclope está esperando el momento preciso para activar su visión y derribar a Magneto. En sincronía perfecta, Scott dispara y Logan empuña las garras, deshaciendo la máquina en pedazos.

Rogue está inconsciente o muerta. No responde a la voz de Logan, ni tampoco a sus desesperados intentos por obligarla a absorber sus poderes regenerativos. Logan la estrecha entre sus brazos y Pícara reacciona. Lobezno se desploma en el suelo y Marie vuelve a respirar.

De vuelta en la escuela, todo parece recuperar su lugar. Xavier se ha despertado, Lobezno está en la enfermería bajo los cuidados de Jean Grey y Pícara ha aceptado su nuevo look de cabello bicolor. El resto de los X-Men se encuentran frente al televisor presenciando como Robert Kelly pide disculpas por la Ley de Registro de Mutantes. Sin embargo, el senador Kelly está muerto y no tiene los ojos de color amarillo. Deducen que Mística ha sobrevivido y se está haciendo pasar por el senador.

Charles entrega a Logan la ubicación de una base militar en Canadá, cercana al lugar donde le encontraron. Él decide marcharse con la esperanza de rellenar los huecos de su memoria. No tiene intención de despedirse, pero Pícara le sorprende y Lobezno se quita su colgante, lo deposita en manos de Rogue y promete que volverá a buscarlo. Le vuelve a robar la moto a Scott y se va rumbo a lo desconocido.

Duelo de titanes

Tras los acontecimientos en la Estatua de la Libertad y el atentado contra la ONU, Magneto es encerrado en una prisión de máxima seguridad para él. No hay ni un solo objeto de metal en kilómetros a la redonda. La celda entera se compone de plástico. Es gracioso ver como, cuando Charles va a visitarle, reemplazan su habitual silla de ruedas por una de plástico transparente y como las fichas de ajedrez que usan para jugar y hasta el tablero son de plástico también.

Charles y Magneto jugando al Ajedrez
El final deja claro que esto ha sido solo el primer asalto.

Como bien sabemos, Charles y Erik, solían ser amigos en su juventud. En esta película no se hace mucho hincapié en la historia de su amistad. Se menciona de pasada y para darle contexto a ciertas partes de la trama. Sin embargo, se deja ver claramente que se importan el uno al otro. Como todo buen amigo, Xavier espera que Erik entre en razón y desista de su idea de prender el polvorín que iniciará la guerra entre humanos y mutantes. Charles quiere que Erik recupere la esperanza y que aparte sus tormentas. Pero, Erik Lehnsherr, lleva demasiado tiempo convertido en Magneto. Continúan su partida de ajedrez mientras que Erik le advierte a Charles de que algún día saldrá de allí y el Profesor contraataca con que estará esperándole para detenerle.

Mis impresiones

Esta película me ha despertado una fuerte nostalgia. Sobre todo, como he comentado en la introducción, con la llegada de Deadpool y Lobezno este año y al volver a ver a Hugh Jackman interpretando un papel que borda tanto, como es el de Wolverine. Aunque nos quedan muchas cintas de este universo por explorar, me ocurre algo similar a cuando te aproximas al final de una serie que llevas viendo durante cuatro meses y que se ha convertido en tu favorita, no quiero que termine nunca.

Con ese sabor de boca quiero empezar a hablar de algunas cosas buenas y otras no tan buenas. Lo mejor de toda la película son la trama y los personajes. La trama, porque es ese viejo tango entre humanos y seres diferentes. No me refiero exclusivamente a los mutantes, ya que esa misma premisa la hemos visto en otras historias cientos de veces (con aliens, monstruos, androides…) Los personajes son muy especiales. No hay ni uno solo que exista para rellenar la hora y cuarenta que dura la peli. Todos tienen su parte con más o menos protagonismo, pero son relevantes.

El punto es que a los humanos les cuesta aceptar lo que es diferente, porque tienen miedo de los mutantes y deciden que controlarlos es la mejor opción para mantenerse a salvo de ellos. Sin embargo, no todos los humanos poseen un temor racional. Hay algunos que odian tanto a los mutantes que parece que no han considerado que pueden acabar con ellos chascando los dedos. Una parte no quiere guerra y a la otra le da igual, porque cree que los humanos han alcanzado a los mutantes en cuanto a tecnología.

El personaje que se lleva de calle la película no es Lobezno, ni Charles o Pícara; es Magneto. En mi opinión, Erik es el personaje con más profundidad y un villano de los que ya no quedan. En este punto, no conocemos su historia al completo, pero sabemos que su odio por los humanos no es aleatorio. Está fundamentado en todo lo que ha sufrido a lo largo de su vida. Me da la sensación de que llegar a la conclusión de que la única solución viable es desatar una guerra entre mutantes y humanos no ha sido fácil para él. Creo que ha tenido muchas batallas internas y conflictos, hasta que ha tenido que escoger entre los suyos y aquellos que les hacían la vida imposible. Esa decisión le costó su amistad con Charles.

La parte más negativa de la película es que Charles parece débil o sufrir un exceso de confianza. Mística se cuela muy fácilmente en la escuela y en Cerebro, dejando fuera de combate a Charles. Me hubiera gustado ver más acción por parte de Charles o que no fuese atropellado por sus palabras constantemente, ya que confía en los humanos y estos no hacen más que atacar a sus X-Men. No podemos negar que la presencia del Profesor es motivo de admiración y de guardar silencio, pero da la impresión de que los años le han consumido. Cosa que no ocurre con Erik. Magneto luce mayor físicamente, pero sus poderes superan a todos los X-Men juntos.

Otro aspecto que no me gustó fue el triángulo amoroso entre Logan, Jean y Scott. En esta primera parte no tiene apenas desarrollo. Jean y Scott se conocen desde hace tiempo y se nota que comparten una relación especial. Sin embargo, Logan es como un latigazo en la vida de Jean y la química que fluye entre ambos personajes, ya quisiera Cíclope tenerla con Jean. Parece que Jean está cegada con Scott y Logan condenado a ser un lobo solitario para siempre. Creo que lo hacen así, porque el orden natural de las cosas es que Lobezno esté solo y que los otros dos tortolitos formen una parejita feliz.

Quedaos a bordo del barco si queréis seguir explorando el universo de los X-Men. Aún nos falta mucho por recorrer. Seguimos con X-Men 2.

Autor

  • Avatar de Marina - Wanheda de Los 100

    Mi abuelo me compartió el amor por la escritura. Sus manos ancianas me enseñaron que para escribir hacen falta dos cosas; corazón y verdad. Ya lo dijo Stephen King: "escribe sobre lo que sabes que es cierto". Así, aprendí que la inspiración es el mayor regalo y maldición de un escritor. Hay dos cosas que vería y leería en bucle para el resto de mi vida y son; Harry Potter y Los 100.

    Ver todas las entradas

TAMBIÉN TE PUEDE GUSTAR

Retro-crítica de Dumbo (1941): el valiente elefante que nos enseñó a volar

¡Dumbo al rescate! Dumbo fue una película con un presupuesto inferior a sus predecesoras; Blancanieves y los siete…

PorDeMarinaMay 15, 2025

Crítica de Ant-Man y la Avispa (2018) – Más pequeña, menos inspirada

Una secuela que no se agranda, se encoge Ant-Man (2015) fue una película menor dentro del MCU, pero…

PorDeJaimeMay 13, 2025

Crítica de Vengadores: Infinity War (2018) – ¿La mejor película de Marvel?

El mayor evento del género de superhéroes 10 años. Es el tiempo que transcurrió entre Iron Man y…

PorDeJaimeMay 12, 2025

Retro-crítica de Pinocho (1940): El inolvidable clásico de Disney que dio vida a la magia animada

Pinocho o, en su título original, Pinocchio fue la segunda película animada producida por Walt Disney, precedida por…

PorDeMarinaMay 8, 2025
5 1 voto
¿Te ha gustado?
Suscribirse
Notificar de
guest
0 Comentarios
Más Antiguo
Más Reciente Más Votado
Comentarios En Línea
Ver Todos los Comentarios

¡Únete a nuestra Newsletter!

Regístrate para recibir las últimas críticas frikis en tu correo electrónico.

¡No hacemos spam! Lee nuestra política de privacidad para obtener más información.

GALERÍA DE IMÁGENES

Portada de Dumbo de 1941
Portada de Clair Obscur: Expedition 33
Portada de la crítica de Ant-Man y la Avispa
Portada de la crítica de Avengers: Infinity War
Portada de Disney Pinocho.
Portada de Black Panther (2018)
Portada de Blancanieves y los Siete Enanitos (1937)
Portada de Thunderbolts*
Portada de la serie Samurái de ojos azules.