¿Cómo se hizo La bella durmiente?
La bella durmiente o, en su título original, Sleeping Beauty, es el largometraje número dieciséis del estudio del ratón. Se estrenó el 29 de enero de 1959. Hace ya sesenta y seis años. Fue precedida por La dama y el vagabundo en 1955 y sucedida por 101 dálmatas en 1961. Cuenta con una modesta duración de una hora y quince minutos, manteniéndose en la recta línea de otros proyectos de Disney que apenas superan los sesenta minutos, como pueden ser Dumbo, Bambi o La cenicienta. La película fue producida por Walt Disney Productions y distribuida por Buena Vista, que sustituyó al antiguo RKO Radio Pictures.
La dirección corresponde a cuatro personas que ya habían estado involucradas con otros proyectos de Disney: Clyde Geronimi, que participó en pelis como La dama y el vagabundo, Peter Pan o Alicia en el País de las Maravillas, Les Clark, que animó a los enanos en Blancanieves y los siete enanitos y a otros personajes como Pinocho o Campanilla, Eric Larson, que fue animador y, al igual que sus compañeros de La bella durmiente, trabajó dando vida a muchos personajes de los clásicos Disney, y Wolfgang Reitherman, que colaboró en el campo de la animación y de la dirección con Merlín el Encantador, El libro de la selva y Los Aristogatos.
Como Blancanieves y Cenicienta, La bella durmiente narra la historia de la princesa Aurora, que sería la tercera princesa de Disney. El suyo fue un proyecto especialmente ambicioso. Para empezar, fue el más caro de la historia de Disney, costando seis millones de dólares. El apartado de animación fue bastante complejo, ya que Walt se empeñó en que la película evocase en el espectador la sensación de ser un tapiz o la extensa pintura de un cuadro en movimiento. Utilizaron por última vez el entintado manual y se rodó con Super Technirama 70, que fue un formato de 70 milímetros de película muy popular en los sesenta.
Los fondos de la cinta fueron otro caso aparte. Eyvind Earle fue el responsable de producción y el elegido para pintar los fondos de la película. Aproximadamente, tardaba entre una semana y diez días en acabar una, lo que alargó muchísimo el ámbito técnico del filme. Walt Disney le dio bastante libertad a Eyvind Earle en cuanto a la toma de decisiones creativas, cosa que es rara en Walt, porque hemos podido comprobar que le gustaba controlar todo.
Lo cierto es que la producción de Sleeping Beauty se extendió durante casi una década. En 1950-1951, se comenzó a desarrollar la historia y el guion. Para el año 1952 se grabaron las voces de la mayoría de los personajes. La banda sonora y las canciones, que se adaptaron del ballet La bella durmiente de Piotr Ilich Chaikovski, se registraron en 1957. La producción animada fue lo que más tiempo abarcó, alargándose desde 1953 a 1958. Por lo tanto, La bella durmiente fue un proyecto de menos de diez años que debía recuperar una inversión millonaria.
Desafortunadamente, como ocurrió con Pinocho en 1940, la película fracasó en taquilla y no consiguió recaudar más de lo invertido en su producción. La estética, el estilo y la animación fueron muy criticadas en la época. Aunque, esta es la prueba fehaciente de que aquel que tira la primera piedra, el loco que emprende y se arriesga por algo nunca visto, siempre es señalado con el dedo y contemplado con desdén. Las personas suelen arrimarse a lo innovador con recelo. Tal vez porque se les hace raro a la vista o porque no están acostumbradas a ello. Pero, lo acaban aceptando cuando gana popularidad.
En la actualidad, La bella durmiente es considerado uno de los mejores clásicos de Disney y su animación se percibe como hermosa y pionera. Si me preguntan a mí, la animación, los colores y el lado creativo de la película me fascinan más que lo actual en los proyectos modernos de Disney. Pienso que el 3D de Enredados, Frozen o Vaiana 2 no le llega ni a la suela del zapato a la animación de Sleeping Beauty. Es un insulto comparar ambas técnicas, ya que, aunque la animación de las películas 3D es bonita y más sencilla, carece de la belleza, dedicación y magia del esfuerzo invertido en La bella durmiente.
Debería añadir que es mi película preferida de princesas de todas las que ostenta Disney. No solo por sus colores, apartado visual y animado y sus personajes, sino también por su música. La canción de «Eres Tú El Príncipe Azul» u «Once Upon a Dream» es de las melodías más hermosas que se han empleado en un musical de Disney. Se encuentra a la altura de «El Ciclo de la Vida» de Táta Vega para El rey león, canción que considero la mejor de todas las que he oído en Disney.
Hasta la fecha no existe ningún live action que adapte la versión de 1959 como tal. Sin embargo, hay varias películas de acción real que divergen de La bella durmiente o utilizan a sus personajes. Principalmente, tenemos la de Maléfica (Maleficent) de 2014 y su secuela Maléfica: Maestra del Mal (Maleficent: Mistress of Evil) de 2019. En 2021, se confirmó que se realizaría una tercera entrega, titulada Maléfica 3: El Hada Negra. Se preveé que dicha película llegue a las pantallas en 2025.
Las películas de Maléfica narran un origen distinto de la bruja, haciéndola ver más como un hada que como una hechicera malvada. Maléfica es interpretada por Angelina Jolie y Aurora por Elle Fanning. Personalmente, solo he visto la primera película y me pareció bastante buena y emotiva. Muchísimo mejor que el desesperado empeño por sacar live actions de algo que no necesita transformarse en carne y hueso.
También quiero mencionar las películas de Los descendientes (Descendants), que siguen las aventuras de los hijos de los villanos clásicos de Disney. Tales como Maléfica, la Reina Malvada, Cruella de Vil, Úrsula o Jafar. Creo importante hablar de esta saga de películas, porque la protagonista es Mal (Dove Cameron), la hija de Maléfica que se enamora del heredero de la bella y la bestia.
Hay cuatro películas de Los descendientes y una quinta entrega programada para 2026. Están Los Descendientes (Descendants) de 2014, Los descendientes 2 (Descendants 2) de 2017, Los descendientes 3 (Descendants 3) de 2019 y Los descendientes: corazón rebelde (Descendants: The Rise of Red) de 2024. La pelicula de 2026 se titulará Descendientes: Wicked Wonderland y funcionará como una secuela de Descendants: The Rise of Red.
¿De dónde surge La bella durmiente?
La bella durmiente fue la última película del estudio basada en un cuento de hadas hasta la muerte de Walt Disney en 1966. En 1989, retomaron esa rama tan característica y significativa de sus proyectos previos con La sirenita. Walt fue especialmente exigente y ambicioso con esta película, aunque no le salió todo lo bien que debería.
Al igual que La cenicienta y Blancanieves y los siete enanitos, La bella durmiente se basa en el cuento de los Hermanos Grimm. Existen otras versiones del francés Charles Perrault en 1697 y del italiano Giambattista Basile en 1634, aunque los afortunados fueron los Grimm. Por ejemplo, en La cenicienta se decantaron por la versión de Perrault, porque la de los Grimm era demasiado oscura. En Sleeping Beauty, la variante más antigua es la de Giambattista Basile, seguida por la de Perrault y zanjada en 1812 por los Hermanos Grimm.
El cuento de La bella durmiente de los Grimm es del mismo año que Blancanieves, ya que corresponde a una recopilación de cuentos infantiles. Viendo el percal de sus otras obras y la crudeza de determinadas acciones o desenlaces, no sé si los Grimm estaban muy enfocados en entretener a los más pequeños o en darles una lectura apropiada para antes de irse a la cama. Lo más probable es que los estándares de lo que es educativo y lo que no fueran diferentes en aquel entonces.
Las principales diferencias y similitudes entre la película de 1959 y el cuento de 1812 son:
- Tanto en el cuento como en la película, el rey y la reina tienen problemas de infertilidad y llevan muchos años buscando un heredero. En la versión de Disney, Aurora nace como hija única y es recibida con mucho cariño, afecto y admiración de sus padres y sus súbditos. En el cuento, el nacimiento de la princesa Aurora es anunciado por una ranita que irrumpe en el baño de la reina y le revela que su sueño se va a hacer realidad.
- En la historia de los Grimm existen un total de trece hadas, mientras que en la cinta animada son tres; Fauna, Flora y Primavera, con sus clásicos colores verde, rosa y azul. Maléfica es una de esas trece hadas, aunque nosotros la conocemos como una bruja.
- Al banquete para celebrar el nacimiento de Aurora se convida a doce de las hadas, ya que los reyes no tenían cubertería suficiente como para servir a las trece. El hada excluida es Maléfica y no le sienta nada bien que no la inviten. En la película, solo asisten tres hadas y a Maléfica no se la incluye, porque es una bruja malvada y nadie la quiere allí.
- En el cuento y en la peli, Maléfica se venga lanzando la misma maldición a la pobre Aurora; al cumplir quince años (en la peli, son dieciseis) se pinchará el dedo con el huso de una rueca y morirá. El hada número doce, que áun no había entregado su don a la princesa, mitiga el hechizo de Maléfica con su regalo para Aurora. La princesa se pincharía y caería en un profundo sueño que duraría cien años, pero no moriría.
- El rey manda destruir y quemar todas las ruecas para tratar de proteger a su hija. Mientras que, en la versión de 1959, las tres hadas se llevan a Aurora a la cabaña del leñador en el bosque, la crían como a una huérfana y le cambian el nombre por Aurora.
- En la película, Aurora está prometida con el príncipe Felipe desde el momento de su nacimiento. En el cuento, Felipe no existe.
- Los Grimm escribieron que, al cumplir los quince años, Aurora se encontró con una anciana que estaba hilando, tocó el huso y cayó víctima del sueño eterno. Disney hizo que la princesa fuese atraída por la magia esmeralda de Maléfica hasta la rueca y que, de igual modo, se pinchase. Mi teoría es que la anciana del cuento es Maléfica disfrazada.
- En el cuento, al igual que en la cinta animada, el letargo de Aurora se extiende por todo el castillo. Los reyes, criados, súbditos y hasta los caballos caen en un profundo sueño.
- Sabemos que, en la de 1959, Felipe despierta a Aurora con un beso de amor verdadero (de la misma manera que el Príncipe Azul revive a Blancanieves del mordisco de la manzana envenenada). Sin embargo, en la historia el sueño de Aurora dura cien años y la leyenda de la bella durmiente se propaga por distintos reinos.
- En el cuento, el príncipe no se enfrenta a imprevistos y complicaciones, puesto que los cien años del sueño de Aurora han prescrito. Sin embargo, sí que se menciona que otros reyes y príncipes antes que él fueron engullidos por la maleza y el espino. Cuando el príncipe llega, es recibido por flores y por una corte durmiente, congelada en el tiempo. El beso que le da a Aurora, lejos de ser el típico de Disney de amor verdadero, es como el despertador que le indica que ya han pasado los cien años.
- Al final, en ambas versiones se casan y son felices para los restos.
Esto es en lo tocante a la versión de los Hermanos Grimm. He de decir que no es tan oscura como me esperaba. Sobre todo, habiendo leído su percepción de La cenicienta y de Blancanieves y los siete enanitos. La de Charles Perrault es más turbia y extraña que la de los Grimm, pero no llega al nivel de Basile. Perrault, como los Grimm, escribió que Aurora era una princesa que cayó en un sueño de cien años por culpa de una maldición y que fue despertada por un príncipe que pasaba por el lugar. Se detalla que, Aurora y el príncipe tuvieron dos vástagos; una niña, de nombre Aurora, y un niño, llamado Día.
El príncipe ocultó a su madre, que era mitad ogresa, la identidad de Aurora y la existencia de sus hijos. Sin embargo, a la muerte del rey y su inevitable ascenso al trono, reveló la verdad. La reina le pidió al cocinero real que matase a su nieta y la aderezase con salsa, porque se la quería comer. El hombre, al igual que el cazador de Blancanieves cuando engañó a la Reina Malvada, le dio carne de cordero en su lugar. La monarca prosiguió peticionando un festín con el pequeño Día y con la dulce Aurora. El cocinero volvió a engañarla.

La ogresa descubrió la verdad, porque escuchó las risitas y los juegos de sus nietos. Entonces, mandó calentar un enorme caldero e introducir todo tipo de víboras, sapos, serpientes y especies venenosas en su interior. Su objetivo era meter a su nuera y a sus nietos allí y comérselos. Por fortuna, fue descubierta por su hijo y, encolerizada y avergonzada, se arrojó al caldero y fue devorada por las bestias.
La versión de 1634 de Giambattista Basile es la más turbulenta y retorcida. Como en las dos adaptaciones previamente mencionadas, Aurora, que aquí se llama Talía, se pincha un dedo y cae en un sueño imperecedero. Pero, aquí no hay beso de amor eterno o un príncipe azul a lomos de un corcel blanco. Un día, aparece por el castillo un rey que estaba cazando por la zona, se encuentra con Talía y la viola. Talía queda embarazada de gemelos, que crecerán criados por dos hadas. La princesa se despierta gracias a que uno de ellos, en un intento por buscarle el seno para alimentarse, le succiona el dedo, extrayéndole la espina de lino.
Tiempo después, el rey regresa al palacio de Talía y se topa con la princesa despierta y con sus dos hijos. Ambos se enamoran y comienzan una relación. El rey le habla a su reina de Talía y sus dos hijos y la reina, soberbia y enfurecida, pide que los traiga para conocerlos. Como en la versión de Perrault, aunque por motivos distintos, le pide al cocinero que los asesine para servírselos como cena al rey. El hombre reemplaza la carne de los niños y la princesa por cabritos. La historia concluye con la reina ardiendo en la hoguera por orden de su marido y con el matrimonio consolidado del rey y Talía.
La versión de los Grimm es mi favorita. La de Perrault no me convence, pero tampoco me provoca rechazo, ya que cuenta una historia medianamente cuerda, sana y normal. Sin embargo, la de Basile me provoca escalofríos e indignación, porque no solo el rey abusa sexualmente de Talía, sino que ella acaba enamorándose de él y engendrando a sus vástagos.
La trama de La bella durmiente
La versión Disney de 1959 relata la historia de un matrimonio que tiene problemas para tener hijos y que, tras muchos años de búsqueda, es agraciado con el nacimiento de una hermosa niña. La pequeña Aurora es recibida con halagos, canciones y vítores por parte de sus súbditos. Los monarcas se encuentran extasiados por el nacimiento de su bebé y planean festejar un banquete por todo lo alto.
Acuden al convite plebeyos, nobles de otros reinos y hadas con intención de colmar a la recién nacida de adoración, atención y buenos deseos. Destaca la presencia del Rey Humberto, que parece una mezcla entre el rey de La cenicienta y Alameda Slim de Zafarrancho en el rancho (Home on the Range) de 2004, y de su hijo, el príncipe Felipe. Aurora y Felipe quedan comprometidos para casarse desde el primer momento en que se ven. Unión que resultará en el acercamiento y la alianza de los reinos de Humberto y del Rey Estéfano.

Las tres hadas, que en el cuento original eran trece, Fauna, Flora y Primavera llegan volando a palacio. Cada una bendice y le entrega un don muy específico a la pequeña Aurora. Flora le dota con el regalo de la belleza, Fauna le proporciona una melódica y suave voz y Primavera se queda con las ganas de obsequiarle su don. Antes de que pueda agitar su varita, las puertas del castillo se abren y un humo verde inunda el ambiente y sofoca a los presentes. Cuando la humareda se disipa, se revela la silueta de Maléfica.
La terrible Maléfica es una bruja muy temida y con mala reputación. En mi opinión, es mucho mejor villana que la Reina Malvada de Blancanieves y los siete enanitos y tiene todo el protagonismo que le falta a la otra. Maléfica está enfadada por no haber sido invitada a la celebración y arroja una maldición sobre Aurora. La condena a pincharse el dedo con el huso de una rueca y morir al cumplir los dieciséis años. Primavera, que aún conserva su don, lanza un hechizo para contrarrestar el funesto destino de la princesa.
Aurora no morirá, sino que caerá en un profundo sueño del que solo podrá despertar con el primer beso de amor verdadero. Aquí se aprecia el reciclaje del mismo argumento que se usa en Blancanieves. Cuando la joven devora el pedazo envenenado de manzana y cae inconsciente, solo puede ser despertada por ese mágico beso de amor eterno y sincero. En La bella durmiente, se emplea el mismo recurso de cuento clásico y tradicional.

El Rey Estéfano manda quemar todas las ruecas para evitar que se cumpla la premonición de Maléfica. Mientras tanto, las tres hadas esbozan un plan para proteger a su ahijada. Se llevarán a Aurora al bosque y la criarán en la cabaña del leñador como a una huérfana. Fauna, Flora y Primavera se harán pasar por simples campesinas, ocultarán sus alas y renunciarán a su magia hasta que llegue el momento. Los reyes aceptan la propuesta y contemplan afligidos como su pequeña les es arrebatada de los brazos.
El decimosexto cumpleaños de Aurora se aproxima y Maléfica sigue sin conocer el paradero de la princesa. Se enfurece, porque sus secuaces, que no son las criaturas más inteligentes, llevan dieciséis años buscando a un bebé en vez de a una niña o joven mujer. La bruja envía a su fiel amigo cuervo a rastrear a Aurora.
En las profundidades del bosque, las tres campesinas han criado con éxito a la princesa, a quien le han cambiado el nombre por el de Rosa. Para el importante evento de su dieciséis cumpleaños planean realizarle una fiesta sorpresa, hornear un pastel de varios pisos y confeccionarle un vestido. Envían a Aurora a recoger fresas para poder llevar a cabo los preparativos de la celebración sin que sospeche.
La escena de Fauna, Flora y Primavera involucrándose en los quehaceres de la fiesta es de las más divertidas de la película. Debaten sobre si utilizar la magia o no y acaban decidiendo que sacarán las varitas de forma excepcional. Fauna se encarga de mezclar los ingredientes y preparar la tarta, Flora de cortar la tela para el vestido y Primavera representa a la modelo.

Aurora se reúne con sus amiguitos del bosque. De nuevo, se nos presenta la idea de que las princesas son tan fabulosas, amables y perfectas que son amigas de todas las criaturas del bosque. La princesa canta y el príncipe Felipe, que está paseando por el bosque, se ve atraído por la voz e investiga su procedencia. Aurora les cuenta a los animalitos que ha conocido a alguien en un sueño y se pone a cantar «Eres Tú el Príncipe Azul«.
Los amigos de Aurora divisan al príncipe a lo lejos y le roban los ropajes. Felipe hace acto de presencia y baila y canta con la princesa. Aurora se muestra reticente a conversar con el príncipe por ser un extraño y él expresa que ya se habían conocido antes en un sueño. Ambos sufren de amor a primera vista y acuerdan volver a verse por la noche.
Al mismo tiempo, las hadas ultiman los detalles de la fiesta con puertas y ventanas cerradas a cal y canto. Primavera se ocupa de la limpieza, hechizando a la escoba, el cubo y la fregona, que se disponen a limpiar por sí solos. Esto hace referencia a la película de Fantasía de 1940. Fauna hace desfilar a la leche, los huevos y la harina por la mesa para que cumplan con la receta del libro y se fundan en un pastel. Flora mueve la varita a diestro y siniestro, tejiendo un estilizado, modesto y rosado vestido.
Se desata una disputa entre Flora y Primavera por el color del vestido. Primavera quiere que sea azul y Flora que sea rosa. Esto culmina en que varios enseres de la cocina y objetos de la vivienda cambien de color. Se empiezan a ver destellos de magia por la chimenea de la cabaña y el cuervo de Maléfica acude como si hubiera visto un diamante en bruto.
El ave presencia como la joven Aurora llega a casa y les habla a sus tías del hombre al quen acaba de conocer. Las tres hadas le revelan su verdadera identidad y que ya está comprometida con el Príncipe Felipe. Aurora se disgusta, porque creía haber encontrado el amor verdadero y el cuervo se marcha raudo a informar a Maléfica.
Los reyes Humberto y Estéfano celebran un banquete y brindan por la futura boda de sus hijos. El Rey Humberto ha ordenado que construyan un palacio para la pareja y Estéfano se indigna, porque Felipe y Aurora aún no se han unido en santo matrimonio y él lleva sin ver ni abrazar a su hija dieciséis años. Tienen una breve discusión sobre la rapidez de los acontecimientos.
Estéfano piensa que Aurora puede asustarse al recibir las noticias de su casamiento y de su origen noble y Humberto no logra entender cómo alguien podría sentirse espantado por su hijo. Acto seguido, Estéfano le asegura que ordenará a los ebanistas que empiecen a construir las cunas. Recordemos que los prometidos aún no se han visto.

Felipe acude a palacio para decirle a su padre que no va a casarse con Aurora, porque se ha enamorado de una campesina. El Rey Humberto dramatiza y le exige a su hijo que no renuncie al trono y que contraiga nupcias con Aurora. A lo que, Felipe, le contesta que debe adaptarse a los nuevos tiempos y modernizarse, ya que se encuentran en pleno siglo catorce. A su vez, las tres hadas conducen a su ahijada al castillo. Le entregan su corona y Aurora rompe en llanto desconsolado.
De repente, las llamas de la chimenea se extinguen y se tornan en una brillante luz esmeralda que hipnotiza a la princesa. Para el momento en que Fauna, Flora y Primavera se dan cuenta, Rosa ha desaparecido por un pasadizo creado solo para ella. Aurora persigue la esfera lumínica hasta una habitación en la que reposa una rueca y la voz de Maléfica le ordena que toque el uso. La princesa lo hace y la maldición se cumple. Las hadas introducen el cuerpo de Aurora en su lecho, la arropan y le colocan una rosa en el regazo.

A continuación, Fauna, Flora y Primavera emplean su magia para dormir al reino entero hasta que su princesa vuelva a despertar. Flora escucha al Rey Humberto murmurando algo de que su hijo se ha enamorado de una campesina que conoció una vez en un sueño. El hada deduce que se trata de Rosa, es decir, Aurora. Las tres parten en busca de Felipe.
El príncipe se presenta en la cabaña del leñador y es sorprendido por Maléfica y sus secuaces. Cuando las hadas llegan, solo encuentran el sombrero de Felipe y deducen que la bruja se lo ha llevado a la montaña prohibida. El castillo de Maléfica es tenebroso. Está custodiado por estatuas, gárgolas y por sus horrendos esbirros. Maléfica celebra el éxito de su plan y la cumplimentación de su maldición. Ha encerrado a Felipe en el calabozo de la fortaleza.
Frente a los ojos de las tres atentas hadas, le muestra con su báculo a la princesa Aurora, que reposa en la torre más alta del castillo de su padre. La bruja hace referencia a los caprichos del destino, ya que la campesina de la que Felipe quedó embelesado y su prometida Aurora son la misma persona. Maléfica se burla de la historia de amor que nunca va a llegar a desarrollarse y se regocija del trágico final de los amantes.
Fauna, Flora y Primavera se cuelan en la celda. Liberan al príncipe, le dotan de una espada y de un escudo, símbolo de justicia, y funden la cerradura de la puerta. Son descubiertos por el cuervo, que alerta a Maléfica y a los secuaces. Felipe se defiende y las hadas transforman las flechas en pompas de jabón y en flores y una especie de líquido, que parece ácido, en un arcoíris. Primavera convierte al cuervo en piedra y Maléfica envía unas nubes de tormenta al castillo de Estéfano. El palacio se rodea de zarzas y ramas de espino, que Felipe atraviesa exitosamente.

Sin embargo, Maléfica no está dispuesta a rendirse. Adopta su forma final de dragón y lanza llamaradas verdes sobre Felipe, que se protege con el escudo. Flora hechiza la espada y esta va directa al pecho de la bestia, provocando que Maléfica caiga por un acantilado (como la Reina Malvada de Blancanieves) y que el cuerpo del dragón se evapore, quedando solo una mancha negra y morada en el pavimento.
El príncipe corre raudo hacia su campesina. Le da a Aurora su primer beso de amor verdadero y la joven princesa despierta. Se rompe la maldición y el encantamiento que las tres hadas habían lanzado sobre el reino. Felipe y Aurora sorprenden a toda la corte al llegar juntos. La princesa se reencuentra con sus padres y con su futuro suegro. Fauna se emociona porque le encantan los finales felices. Flora y Primavera empiezan a pelearse de nuevo por el color del vestido de Aurora, cambiándolo de azul a rosa y viceversa. Los enamorados bailan al ritmo de la melodía de la canción de los sueños hechos realidad.

Conclusión
Si algo representa la película de La bella durmiente, es la palabra belleza. No solo es un clásico que ha pasado de generación en generación, un cuento transmitido de padres a hijos y una historia con cientos de versiones, sino que transmite un mensaje conciso y valiente sobre el amor verdadero. El romance abarca gran parte de la cinta y es el hilo argumental principal. Considero que la historia de Aurora y de Felipe es mucho más hermosa que la de Blancanieves y el Príncipe Azul o la de Cenicienta y el Príncipe Encantador.
Felipe y Aurora están condicionados a casarse antes siquiera de poder decidir por ellos mismos. El recelo en el rostro de Felipe es evidente cuando le dicen que su futura esposa es la que se encuentra arropada en una cuna. Lo maravilloso de este amorío es que se reencuentran como dos extraños. Felipe piensa que Rosa es una campesina corriente y Aurora no sabe que él es un príncipe. Aun así, Felipe está dispuesto a llevar la contraria a su padre, desafiar sus costumbres y casarse con una joven que no pertenece a la realeza. Eso, sí es amor verdadero.
Para que os hagáis una idea de lo importante que es La bella durmiente dentro de los clásicos de Disney, el imponente castillo del parque de Disneyland París (podéis hacer clic aquí para acceder a la reseña de nuestra experiencia en el parque) es el de Sleeping Beauty. No puedo opinar sobre el resto de castillos de otros parques Disney, porque no he estado. Pero, he de decir que el de París es una de las maravillas más grandes que he visto. Es como estar presenciando un sueño hecho realidad, como si te hubieses trasladado al interior de la película y recorrieses cada una de sus escenas.
Ocurre lo mismo con Pinocho, que presta su canción «When You Wish Upon a Star» para la música de introducción de los proyectos de Disney. El palacio que se ve es el de La bella durmiente, que está inspirado en el Castillo de Neuschwanstein situado en Baviera, Alemania. Este castillo también sirvió de base para crear el palacio de La cenicienta.
En resumen, La bella durmiente es uno de los clásicos más reconocidos y que han marcado la trayectoria de Disney. Reflexiona sobre el amor verdadero o el amor a primera vista y la importancia de los sueños. Yo saco una idea muy concreta de la película y es que las maldiciones se hacen realidad, pero los sueños también.
Lo Mejor:
- ✅ El mensaje sobre ese amor verdadero que puede superar todos los obstáculos.
- ✅ La animación única, costosa e idílica de la cinta.
- ✅ El príncipe azul, por lo menos, tiene nombre.
- ✅ La banda sonora y las canciones.
Lo Peor:
- ❌ El enfrentamiento final con Maléfica es muy precipitado.
- ❌ La acción, como el despertar de Aurora o su caída en un sueño eterno, ocurre de forma apresurada en los últimos veinte minutos.
- ❌ Algunas ideas, como la del matrimonio arreglado, que no han envejecido muy bien.